Sin los Contratos WMS, debes realizar los cambios en tres tablas diferentes, ya que los servicios, los acuerdos de servicio y los precios de servicio están separados. Configurar estas tres tablas implica numerosos clics. Además del tiempo y la navegación innecesarios que consume, trabajar en tres tablas resulta confuso. Los Contratos WMS resuelven estos dos problemas. En una sola vista, puedes ver los acuerdos de precios establecidos en las negociaciones y, además, configurar fácilmente otros tipos de modificaciones en la misma página.

Los Contratos WMS te permiten aplicar cálculos de cantidades. Si los configuras correctamente, puedes definir de forma muy específica para cada cliente qué debe calcularse y qué no. Piensa en acuerdos de cantidades u otros acuerdos específicos del cliente. Existen numerosos ejemplos de este tipo, por lo que comprenderás que esto te puede ahorrar una gran cantidad de cálculos.

Un acuerdo existente puede cambiar cuando un cliente necesita más espacio de almacenamiento o servicios adicionales, lo que a menudo conlleva ajustes en los acuerdos de precios. Afortunadamente, no necesitas realizar los cambios en múltiples lugares. Para diversas modificaciones, como entradas y salidas, puedes añadir fácilmente un factbox de contratos. De este modo, los nuevos acuerdos se integran de forma rápida y sencilla en el Contrato WMS.

Los tiempos en que solo podías filtrar por estado del artículo, tipo o transporte han quedado atrás. Con los Contratos WMS, puedes filtrar tanto en el encabezado como en la línea. Por ejemplo, puedes excluir un tipo específico de orden que no deseas calcular. Estas opciones de filtrado adicionales facilitan aún más la ejecución de acciones específicas para tus clientes.

Algunos servicios, como el reembalaje o los controles de calidad, no siempre son necesarios. Pero cuando se realizan, deseas facturarlos. Los Contratos WMS te permiten añadir servicios opcionales que puedes activar manualmente para mutaciones específicas. Así decides tú mismo cuándo se aplica un servicio. ¿Es necesario el reembalaje, por ejemplo? Agrégalo como servicio opcional, y aparecerá automáticamente en la factura.

Ahora quizá pienses: ¿tengo que definir e introducir todo lo anterior para cada uno de mis clientes de forma individual? Para la mayoría de mis clientes tengo prácticamente los mismos acuerdos tarifarios. Lo entendemos perfectamente, y por eso puedes simplemente copiar contratos, lo que facilita aún más la configuración para diferentes clientes o tipos de mutaciones.